Haciendo un corte transversal de la ubre, podemos observar dos sectores de ubicación o almacenamiento de la leche:
1.- Uno superior, donde se almacena la leche alveolar.
2.- Uno inferior, donde encontramos la leche cisternal.
Normalmente, antes del inicio del ordeño, el 70 % de la leche fabricada se encuentra en la parte superior como leche alveolar (en lumen y conductos).
El 30 % restante, se encuentra en la parte inferior de la glándula como leche cisternal (en la cisterna de la glándula y en la cisterna de los pezones).
La composición de la leche alveolar es diferente a la cisternal, ya que la primera tiene dos o tres veces más grasa que la segunda.
Esto explica por qué, cuando se ordeña, la primera leche tiene menos grasa que la última.
En cuanto a la cantidad de proteínas, prácticamente no hay diferencias entre los dos tipos de leche.
Con respecto a las células somáticas, ocurre algo similar, la cantidad es mínima al principio, y máxima al final del ordeño.
1.- Uno superior, donde se almacena la leche alveolar.
2.- Uno inferior, donde encontramos la leche cisternal.
Normalmente, antes del inicio del ordeño, el 70 % de la leche fabricada se encuentra en la parte superior como leche alveolar (en lumen y conductos).
El 30 % restante, se encuentra en la parte inferior de la glándula como leche cisternal (en la cisterna de la glándula y en la cisterna de los pezones).
La composición de la leche alveolar es diferente a la cisternal, ya que la primera tiene dos o tres veces más grasa que la segunda.
Esto explica por qué, cuando se ordeña, la primera leche tiene menos grasa que la última.
En cuanto a la cantidad de proteínas, prácticamente no hay diferencias entre los dos tipos de leche.
Con respecto a las células somáticas, ocurre algo similar, la cantidad es mínima al principio, y máxima al final del ordeño.